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Mi nombre es Parche…

¡Agarraos fuerte, ya que aquí empiezan las aventuras en solitario de uno de los personajes Marvel más famosos!

Bajito, gruñón, fumador de puros empedernido y consumidor de cervezas. ¿Qué hizo que un personaje cómo Lobezno se convirtiera en el favorito de los lectores?

Pues además todo lo anterior, el tener un misterioso origen que hasta muchos años después no conoceríamos y, sobre todo, haber vivido mucho. Son muchos los conflictos bélicos en los que este canadiense ha estado como soldado.

Aunque claro, los detalles definitivos que he dejado para el final son, por supuesto, su capacidad mutante para recuperarse de toda herida que le sea infligida y un esqueleto compuesto por el metal más duro que existe en el Universo Marvel, el adamantium.

Y claro, esas garras…

Pero olvidaos del perfil más superheroico del personaje, al menos por el momento, ya que debido a su carisma, los gerifaltes de la Casa de las Ideas pensaron que dada su popularidad, lo más lógico era que Lobezno tuviera su propia cabecera y, claro, quién mejor para narrarnos sus andanzas que uno de sus “padres” creativos, Chris Claremont.

El guionista podría haber tomado el camino fácil, y seguir enfrentándolo a todas esas amenazas que ponen en peligro a la humanidad día sí y día también. Pero no, como gran escritor que es se le ocurrió despojar al protagonista de su uniforme de Hombre-X y meterlo de cabeza en un ambiente más propio del género noir, haciéndole visitar una ciudad muy especial, donde el crimen anida tanto en los sus lujosos rascacielos y palacios como en la parte baja. Su nombre, Madripur.

Su camino comienza con la búsqueda de un hombre David Chapel, que resulta infructuosa, ya que los parroquianos, sobre todo los que pasan las horas bebiendo y peleándose en el Bar Princesa no están por la labor de ayudarle con sus pesquisas.

Y justo en este punto, Lobezno tendrá que tomar una decisión importante, y es la de convertirse en otra persona, un tipo llamado Parche, al que más de un habitante del lugar acudirá para que le ayude con algún problema, casi siempre relacionado con el submundo criminal, ya que los señores de la droga y sus chanchullos campan a sus anchas por las calles del lugar.

Pero claro, junto a Claremont era necesario un buen dibujante, alguien con una intachable trayectoria que plasmara en viñetas las peripecias del protagonista. Y quién mejor que un auténtico clásico. Me refiero al gran John Buscema que, acompañado por un increíble trío de entintadores, Klaus Janson, Al Williamson y Bill Sinkiewicz, va a dar lo mejor de sí en estas páginas, en las que, obviamente, vamos a encontrarnos con unos atractivos secundarios como la bella joven Jessan Hoan, que comparte con Lobezno una historia del pasado (buscadla en las páginas de La Patrulla-X) y se convertirá en la letal Tygre Tigre, un nombre a respetar en el lugar, que tendrá que plantar cara a villanos como Roche y su letal esbirro Puños de Navaja.

El dramatis personae continúa con una peculiar pareja de féminas venidas desde los Estados Unidos, la atractiva actriz Lindsay McCabe y un nombre que seguro que os suena, y bastante. Jessica Drew, la antigua Spiderwoman. Con el tiempo, y sobre todo gracias al papel de Parche en sus vidas, el dúo se convertirá en detectives privadas que le plantará cara a tipos tan corruptos como el general Coy, que cuenta con un par de matones bastante letales, Camorra y Hemorragia.

Van a ser muchas las peripecias a protagonizar por estos personajes, desde la búsqueda de una espada maldita, con la aparición de el Samurai de Plata, hasta la llegada a la ciudad de un tipo bastante peculiar, cuya presencia será la despedida de Chris Claremont de la colección. Se trata de Mr. Arreglalotodo, personaje creado, y ahí viene el enorme guiño, por el guionista que iba a tomar el imaginario relevo como guionista del título, Peter David, que va a aportar su personal toque al resto de las historias contenidas en este volumen, sabiendo mantener un genial equilibrio entre momentos de gran dramatismo y tensión, como ese recuerdo que lleva al protagonista a los días en los que mordió el polvo (o mejor dicho, a nieve) a manos del temible Dientes de Sable.

Aunque claro, otra de las características que define a David como escritor es su sentido de humor, así que más de una sonrisa se nos va a escapar con los diálogos y alguna que otra situación protagonizada por Parche y sus colegas, a los que se unirá en algunas tramas el piloto de avión Archie Corrigan, ya sea poniendo los puños y avión a su servicio, o ayudándole en la saga en la que tendrán que impedir que un monstruoso villano se haga con la poderosa piedra Gehenna.

Como broche a este volumen, comentar que otro de los grandes dibujantes de la Marvel más clásica tomará el relevo en una historia. Se trata de Gene Colan, que junto a David nos regalan un intenso flashback, donde el protagonista tendrá que enfrentarse de manera muy violenta a un grupo de antiguos compañeros de conflicto bélico.

Y es que, como ya todos deberíais saber, Lobezno, o mejor dicho, Parche, es el mejor en su trabajo.

Marvel Gold. Lobezno 1: Noches de Madripur

Guion: Chris Claremont, Peter David

Dibujo: John Buscema, Gene Colan

Tapa dura

Color

52 págs.

49,95 euros

Panini Cómics

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