¿Os gusta viajar? ¿Conocer nuevos lugares? Pensadlo bien, ya que el destino elegido en este cómic puede ser el último que visitéis…
¡Bienvenidos a Louisiana! Concretamente al Bayou, una zonageográfica en la que desde que naces el primer regalo que recibes no es un sonajero, sino una Magnum 45; tierras en las que la fauna local va desde la serpiente de agua, mosquitos que pueden chuparte la sangre mientras duermes o letales caimanes que esperan pacientes a que te descuides para darte un letal mordisco. Si a esto añadimos un alto nivel de endogamia entre sus habitantes nos encontramos con unas tierras que es mejor evitar si no quieres meterte en problemas, ya que la chispa de la violencia se enciende con extrema facilidad.
En Bastardos del Bayou vamos a encontrarnos con un grupo de personajes, originarios del lugar, cuyas historias, por una serie de circunstancias que poco a poco vislumbraréis, se van a ir cruzando, formando una peligrosa red de secretos, mentiras, hechos del pasado y, sobre todo, muerte.
Para poneros en situación os voy a presentar brevemente a este dramatis personae tan, tan particular:
Zach, es un anciano. En sus venas corre whisky, y guarda un secreto que nadie hasta ahora ha podido revelar.
El Pastor Riley y su mano derecha, el musculoso Chu Chu, van de puerta en puerta predicando una lucha fraticida contra el mal que está matando a muchos de los habitantes del lugar, el consumo de drogas, principalmente metanfetamina. Eso, si, tras el alzacuellos del religioso, nada es lo que parece.
Y hablando de drogas, la rotunda Doucette, que pasa la mayor parte del tiempo en una laboratorio de meta con pocas, poquísimas medidas de seguridad.
Eddie y Tee-Beau, son la representación física del lugar: Violentos, cínicos, racistas… Seguro que votaron a Trump.
Destranville, heredero de la “aristocracia”, sudista, odia a todo aquel que no comparta su color de piel y siempre ha manejado con puño de hierro a los habitantes de Peaux-Brummes.
Chad, ex militar, acosado por los fantasmas de la violencia ejercitada en la lejana guerra.
Jed y Janette, una pareja al borde de la ruptura, sin un futuro claro, debido sobre todo a la actitud de él, que es la definición gráfica de un auténtico loser.
Aldus, una presencia fantasmal que tiene la llave a mucho de los oscuros secretos acaecidos en estas malas tierras.
Ty, un chaval que sueña con convertirse en un legendario luchador de westling, su única forma de escapar.
Y finalmente una “pareja” de lo más peculiar, Mo Jux y Earl, dos tipos de avanzada edad, conocidos y respetados por todos (o casi todos) y que van a jugar un papel muy importante en la trama, debido sobre todo a una curiosa “capacidad” que posee el segundo…
Creo que ya simplemente con haberos presentado a este peculiar grupo de personajes es razón de más para que os lancéis de cabeza a la lectura de esta impactante historia. Pero si además os digo que sus creadores son una pareja artística muy bien avenida como la formada por Armand Brard y Neyef, surgidos del talentoso sello galo Label 619, creado por RUN, que ahora se lanzan de cabeza con un relato largo del que este volumen es la primera entrega.
Y en ella son sentadas las bases argumentales de esta enrevesada trama que, al final de la última página, se os revelará con total claridad, dejándoos, como a un servidor, boquiabiertos y con ganas de más…
Bastardos del Bayou 1 – Juke Joint
Guion: Armand Brard
Dibujo: Neyef
Tapa dura
Color
96 págs.
16 euros
Nuevo Nueve